Baal Zabut



A menudo las moscas:
agentes de muerte y deterioro
la cuarta plaga Bíblica de Egipto.
Las malvadas.
Las malvadas.
Pero también las indomables
las insistentes y tenaces frente al conflicto
las contraelvidrio.
El mayor galardón militar en la cultura egipcia.
La más alta distinción concedida por el faraón a sus valientes.
El faraón Ahmose condecoró en una bella ceremonia a su madre:
Ahhotep con un collar con tres grandes moscas de oro, de 9 cm de altura.
Ninguna otra reina de Egipto recibió esta condecoración militar.
Los habitantes de Cirene ofrecían sacrificios al dios Acoro
para que les librase de estos insectos.
Los acarnanios veneraban a las moscas
y los naturales de Accaron ofrecían incienso a la divinidad que las cazaba.
Los griegos tenían así mismo su dios Cazamoscas.
Eliano dice que las moscas se retiraban por sí solas en los juegos olímpicos.
En el templo de Apolo
cuando se acercaba la fiesta,
se inmolaba un toro a las moscas
que, una vez saciadas, se retiraban.
El demonio Belcebú recibe el nombre de "el señor de las moscas",
un juego de palabras
que convirtió al dios cananeo Ba'al Zebûl (literalmente "el señor príncipe")
en Baal Zabut ("el señor de las moscas").
En Roma, el templo de Hércules vencedor
en el cual no entraban jamás las moscas.
En boca cerrada.
En boca cerrada.
Los judíos consideraban de feliz agüero
que no se viera jamás una mosca en el templo de Salomón.
"Yo oí el zumbido de una mosca cuando moría"
eso le dijo Emily Dickinson a Machado.

Comentarios